Lo reconozco, me gusta, este medio día después de hacer las compras con la tripulación para la exploración de mañana por la costa he quedado con mi hermano Jos.-ejo.
Hemos estado un bar repleto de gente, de gentes, ha sido fantástico el poder compartir ese tiempo con gitanos y magrebíes. Gritos, risas y la mar de comodidad.
Al llegar a la Nave de los Sueños, pude escuchar como de otras naves surgían músicas étnicas y antes poco habituales, pero que poco a poco se hacen cotidianas sí fuerismo más abiertos, todos, de mente surgiría el enriquecimiento.
Por la tarde la tripulación, hemos ido a una cala todos se bañaban, pero yo no. He preferido dar un paseo y hacer fotos.
Me da pena que en poco tiempo todo ese hermoso paisaje desaparezca.
Pero aun quedan focos de esperanza
imagen de muyinternetsante.tk
fin de l a transmisión diaria.