Este fin de semana ha sido fantástico, cuantas cosas nos han sucedido.
El viernes por al noche fuimos de cena en un bar al aire libre
resulta que un grupo numeroso que ocupaba la mesa de al lado, se excedieron en la bebida, y como resultado dos supuestos amigos
casi se ensalzan en una pelea.
Hubo un momento de tensión, los camareros comenzaron a quitar vaso y botellas de la mesa, para impedir que se golpeases
el caso es que los separaron. Pero uno de ellos enfurecido y cegado, intentó golpear al otro. Pero varios compañeros lo levantaron en peso y se lo llevaron en volandas. Al pasar junto a nuestra mesa, uno de ellos le dijo: Domínate como lo hombres.
Me resulto curioso, interesante que asociara el hecho de dominarse con la hombría, cosa popularmente contraria. Pero me parece que tiene toda la razón, lo difícil es controlarse, en ceder un poco de terreno, para no llegar a más, intentar tener más conocimiento, que el adversario. No me gusta la violencia y la rehuyo.
El sábado por la noche, después de toda la tarde en la playa haciendo fotos, fuimos a un concierto. No podía entrar yo al recinto, porque no estaba permitido el paso de cámaras de fotos, cosa absurda porque si permitían móviles con cámara.
El caso es que estuve a punto de irme a dormir, no quería agua la fiesta a la tripulación. Pero por un momento, a Áncarus, a Jos, Inmica y a mi, nos invadió una ola de atrevimiento. Casi sin pensarlo, Jos y yo nos pegamos junto a la valla, mientras Inmica y Áncarus entraban en el recinto. Cuando no miró nadie, baje la cámara al suelo usando el asa de la funda sin agacharme, dejándola descender, después Jos la empujó con la pierna y Ancarus la cogió y se metió entre la multitud del concierto
Exudé mucha adrenalina en el concierto, porque fue genial estar allí otro verano más con la tripulación de la Nave de los Sueños y con mi hermano.
fin de la transmisión diaria.
Posted by eolovano at 8 de Agosto 2005 a las 05:27 PM