Ya estoy otra vez en la nave. Dejadme que os explique los prodigios que he vivido este fin de semana flotando en el espacio.
Estaba de pie sobre la superficie del gran papel blanco. La distancia planta delimitaba un falso horizonte alejado, y sobre él, amanecía la estrella que me alumbrada.
Mi traje espacial proyectaba una largísima sombra, quieta estática. Me había quedado embelesado por la espléndida imagen.
Y el silencio se quebró.
-Pinta-Dijo una voz que identificable procedencia
-¿Cómo?
-Si, mira cuanta superficie blanca, monocromática, aséptica. Vamos, píntala, para eso esta.- No sabía si la voz resonaba en mi cabeza o venía del exterior.
-¿Pero con qué? ¿Para qué?-Dije muy confundido.
-Pues imagina algo, una herramienta que te ayude a pintar
dibuja tus sentidos, tus emociones, quien eres en colores
No me pareció mal, así que me puse en ello. Imaginé y maravillosamente apareció ante mí un aparato. Tenia forma de manillar de bicicleta, pero en vez de acabar en una horquilla para sustentar una rueda. Tenía un palo largo con dos reposapiés y al final una enorme cabeza de pincel. Me subí en él y salió disparado deslizándose por la superficie del plano.
Dejaba una línea de color a su paso, para cambiar del verde al rojo, daba un salto y una pirueta, para cambiar del azul al amarillo un giro en el aire y alzaba los brazos
de esta manera pintaba en el enorme lienzo de mi vida.
Practicaba una simpática danza sacada de alguna etnia africana.
Pero el dibujo que dejaba tras mi paso eran rectas, paralelas
una visión isométrica de un palalelepido en la tercera proyección en verdadera magnitud.
Visto desde arriba, parecía coherente, magnífico, a mi me gustaba, pero había algo que no me gustaba.
Entonces comprendí que debía relajarme, dejarme llevar por mis sentidos, no pintar con consciencia, con coherencia
debía hacerlo disfrutando, podría hacer cualquier cosa sin orden, ni contexto.
El cuerpo me bailaba en el extraño aparato
así que me dejé llevar por la mágica coreografía. Y de ella surgió un cuadro de fantasía de líneas circulares, curvas, puntos, mezclas imposibles de diversidad de colores
Ya exhausto, me despedí de la voz
de mi subconsciente. Y pude contemplar desde una de las escotillas de la nave la obra inacabada.
Porque hay mucha vida por delante, mucha gente por conocer, muchas aventuras por vivir
Me pregunto cómo será el lienzo al acabarse que forma tendrá en su conjunto. No me gustaría verlo como el verdadero retrato de Dorian Gray de Oscar Wilde
Me gustaría que fuese como un Soraya luminoso, cotidiano
Pero eso es un esfuerzo de cada día.
fin de la transmisión diaria.
Posted by eolovano at 7 de Noviembre 2004 a las 07:53 PM
Pinza zagal pinta!! Que no hay mas cuadros que lienzos por rellenar!!
Un saludo..
Posted by: angelillo on 9 de Noviembre 2004 a las 03:31 PMnbkstyho
Posted by: father and daughter sex on 19 de Diciembre 2004 a las 01:19 PM