Miré otra vez por la ventanilla. No me podía creer lo que estaba contemplando, pero una vez apoyada mi frente sobre el cristal, no había duda, allí estaba.
Un rectángulo de fino papel blanco de varios kilómetros de lado eclipsaba el sol espacial. Corrí por la nave en busca de mi escafandra para salir una vez más al inhóspito exterior.
Siempre el silencio, silencio y el gran papel en blanco. ¿Cómo poder enfrentarme a ello? Como descifrar al código, ese mapa invisible e imaginario.
Siempre me han dicho que las líneas paralelas se tocan en el infinito. ¿Por eso ha salido fuera de la Nave de los Sueños? Por acercarme un poco más a ese punto de unión lejano, inalcanzable?
El enorme papel flotaba en una orbita eclíptica perfectamente predecible, así que no tuve dificultad alguna en posarme en el como un pequeño insecto en un campo de hielo. Me daba miedo ver tal tamaño, tanta distancia.
¿Qué encontraré al explorarlo?
fin de la transmisión diaria.
Posted by eolovano at 4 de Noviembre 2004 a las 06:43 PM