13 de Junio 2006

Sin energía.

Viajaron tan rápido, que Rásselas se vio obligado a desconectar la luz de toda la nave. Ahora todo estaba iluminado por las rojas luces de emergencia.

Pero para mantener dicha aceleración e intentar huir del filo de la espada de Atalanta, la cazadora, tuvieron que quemar todas las provisiones de energía que contaban en las bodegas de La Nave de los Sueños.

Las situaciones, cuando vienen mal, nunca lo hacen solas. Precisamente, cuando comenzaron a reducir velocidad. Un punto fugaz apareció en la pantalla del radar.

-¡Rásselas¡- Dijo Egle asustada.-¿Por qué paramos?

-Por la sencilla razón de que nos hemos quedado sin combustible.- No podía despegar su mirada a la pantalla de la Gran Computadora de Abordo. Las barras porcentuales que representaban las existencias energéticas se reflejaban luminescentes en su cara, en sus retinas.- La Nave de los Sueños solo funciona con un combustible que sea capaz de irradiar calor, no es el uranio, ni el plutonio o el radio… es la ternura. La ternura mueve los motores haciendo posible que esta aventura siga adelante.

Una serie de pitidos avisaron de la proximidad de Atalanta, pero ahora ellos se desplazaban a una velocidad casi simbólica.

-Rápido- corrió Egle hacia los mandos de la nave.- Debes armas las defensas, ¿Y los cañones?

-No tengo.- Esbozaba una sonrisa mientras la mirada permanecía perdida tras la escotilla a miles de kilómetros.

-¿Cómo? ¿No tienes armas? ¡Por mil demonios! Eres, eres….-No llegó a terminar la frase.

-Soy el eterno viajero de sueños e ilusiones, eterno viajero de amores.

Eterno Viajero.
Soy eterno viajero de sueños e ilusiones.
Soy eterno viajero de amores.
Cruzaré los mares en mi barco pirata
con los cañones acenagados
y mi bandera será blanca.
Dominaré los aires como un pájaro
desprendiendo de mi cuerpo
blancas y multicolores plumas de amor y paz.
Cabalgaré por valles y montañas a lomos de mi Gitana
Sin dejar más señal para el retorno
que la sonrisa y la amabilidad.
Escucharé historias escalofriantes de viejos.
Contaré historias inventadas
a preciosos niños dulces y traviesos;
y amaré tierna y locamente
a la mujer que merezca del amor puro
de aquel dulce vagabundo.

EXTRECHINATO Y TU

-Mis cañones estan acenagados. No lucharé- Dijo cerrando los ojos.


…fin de la transmisión diaria.

Posted by eolovano at 13 de Junio 2006 a las 06:22 PM
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