Una gran fiesta y duraba varios días más.
Todos los piratas disfrutaban de un tiempo de esparcimiento de desinhibición después de un largo periodo de trabajo. En un principio, Rásselas se encontraba desplazado, alejado. Pero por casualidad, asistió a una charla, a una exposición. Y fue en ella cuando él fue consciente que tal vez esa sensación venia derivada por el miedo, por el miedo a perder lo que siempre ha amado y se ha aferrado, las raíces. Pero conocer un poco más de donde viene, hacia donde se va, ha hecho que esa sensación de temor desaparezca, se diluya por fin.
En el largo viaje de nuestro amigo, en la gran epopeya que debe realizar, jamás se debe alejar del conocimiento de sus raíces, de su origen. Si no, andará perdido, son orientación posible.
La fiesta terminará pronto, con una gran campanada, pero Rásselas no permanecerá en la base de los piratas por mucho tiempo. Piensa que ya es momento de continuar con su periplo, tiene una misión y no se puede demorar demasiado.
Encontrar su ilusión como una pompa de jabón.
Raíz
Pedro Guerra
raíz que debo a mis viejos
a mis hijos y a los besos
que me guardo y que no di
raíz que busco y no encuentro
que vive oculta en los versos
que no escribo y que perdí
raíz de todos nosotros
raíz que aguarda en los ojos
que hacen guardia para ver
raíz abierta a la vida
raíz hoguera y guarida
raíz que está por hacer
¿sin esa raíz
qué será?
raíz dormida en la tierra
raíz que enreda mis piernas
y me toca el corazón
raíz que gana mis guerras
la guerra contra la guerra
y el estado del dolor
raíz de toda la gente
raíz que esquiva la muerte
que me enseña dónde ir
raíz que roza lo incierto
raíz que abrazo y me invento
para así sobrevivir
¿sin esa raíz
qué será?
fin de la transmisión diaria.