Ya vuelvo a viajar con mi Nave de los Sueños, tal vez la rebautice como La Nave de los Seños Perdidos o La Nave de los Sueños Anhelados. No lo sé.
El caso es que no he querido ver mi futuro y no creáis, mi parte humana, mi parte mortal, mi yo embutido en este cascarón de piel
quería. Es normal. Pero mi yo más intrínseco, la chispa de la vida que hace moverme cada día y me mantiene en pie, La parte de mi ser que puede observar los colores y los aromas, los sonidos, la esencia
me decía que no. Y, después de una terrible lucha interna, ganó esta última.
No creáis, no significa que todo acabó en el interior del asteroide. No, por la noche, como suele sucederme desde hace meses se cierne sobre mi una gran desolación, que solo puede atenuarla los constantes bombardeos de mensajes sms que envío a mi tripulación y la idea de que en breve, volveré a Murcia-murcindäe.
Quiero romper la barrera del sonido, dejar atrás a los escabullizos fotones, correr con mi nave dejando una estela que rasgue las telas del universo. Y todo por acercarme a ese magnífico planeta, porque allí reside mi esperanza. El fin de mis lamentos, un nuevo principio, otra oportunidad para iniciar una nueva aventura.
fin de la transmisión diaria.
Posted by eolovano at 28 de Septiembre 2004 a las 05:41 PMAy las noches de desolación....
" Cuando tú encuentres el camino
Otros te encontrarán a ti.
Al pasar por el camino
Serán atraídos hasta tu puerta
Y el camino que no puede oírse
resonará en tu voz
Y el camino que no puede verse
Se reflejará en tus ojos."
Lao Zi.