Llanto en el cielo.
Escucho en la lejanía
El susurro melancólico de un otoño aproximándose.
Escucho, atrapado en mi memoria
El eco de un sueño errante.
Me despojo de recuerdos pasados
De pesadas cargas que marchitan mis pasos
Poco a poco, entro en un letargo
Duermo en la noche fría, sin abrazo.
Enterrado y olvidado las nubles sobrevuelan el cielo
Como ballenas de agua en el espacio.
Y al verme,
Sucio, en harapos
Lloran.
Y sus suspiros arrancan las semillas de los árboles
Las arrastran, las golpean, las desuellan
Hasta que estas encuentran un refugio enterradas
Abrigadas en la tierra que las empapa.
Yo soy ahora eso,
Nada más que una semilla, esperando la primavera.
Deseando ser un almendro, que floreciese en invierno.
Ahora mientras tanto.
Resuena el llanto del cielo
Un cadaver exquisito.
...fin de la transmisión diaria.