21 de Marzo 2005

Rompiendo sueños para empezar otros.

Todo estaba oscuro a excepción de la luz de las estrellas que lograban entrar por la pequeña escotilla de su camarote. La Nave de los Sueños orbitaba alrededor de Murcia-murcindäe dejándose llevar por las corrientes gravitatorias del planeta.
Todo estaba tranquilo, no se oía nada.
Rásselas se sentía mecido por el vaivén de esa corriente, este favorecía la creación de grandes sueños.
Soñó con una gran montaña blanca, un valle encantado de bosques oscuros y recónditos parajes. Vio una luz en el cielo y comenzó su andanza por la ladera de esa cordillera, quería alcanzar los más alto, llegar a las cumbres visitarlas todas.
No importaba el esfuerzo, no pensaba en el riesgo... el cosmos se queda pequeño, por que no quedará ni tan solo un lugar donde él no haya buscado, y al final la encontrará.
Oyó un suspiro, sintió un abrazó tan real que le hizo estremecerse en la cama.
Saltó de esta y se puso las botas... no podía perder más el tiempo. Antes de que el sueño se evaporizase en la consciencia despierta salió corriendo hacia el puente de mando de la nave. Tomó los mandos de la gran computadora de abordo y mancó una coordenadas.
Iba a comenzar una expedición otra vez en su búsqueda, había estado demasiado tiempo dormido, luchado con sus propios demonios, pero ya estaba preparado... ya había perdido el miedo.

Los motores de la nave rugieron en la quietud del espació.
Los habitantes del planeta vieron una estrella fugaz en el firmamento, algunos incluso pidieron un deseo.

...fin de la transmisión diaria.

Posted by eolovano at 21 de Marzo 2005 a las 05:25 PM
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