Los propulsores de popa se pusieron en marcha a las 7.00 de esta mañana. La estructura de la Nave de los Sueños crujió como si de una barcaza del siglo de oro en medio de un huracán caribeño se tratase.
Las estrellas se estiraron dejando de se puntiformes, ahora eran líneas estiradas de colorines. Serpentinas rígidas en el espacio interestelar.
Todo va deprisa, o es que yo voy muy lento pero en el hiperespacio no se puede dudar. Un solo error puede ser nefasto y contraer unas consecuencias inimaginables. Por eso hay que ser certero en cada maniobra. Ya son las últimas para acercarme aun más a Murcia-murcianäe.
fin de la transmisión diaria